Los espots iniciales de la campaña electoral en el Edomex, destacan por la hipocresía, en el caso del PRI y del PAN, como si no fueran los incubadores y paridores del escorpión del Damocles que nos amenaza día con día. El de la otra coalición, donde está el PRD, es de esperarse que con el tiempo develen en que pueden más - el más, indica que los otros también pueden, sólo es cuestión de grado-. Han iniciado con el tema de la violencia hacia las mujeres, lo cual es un acierto, pero nos quedamos en lo mismo ¿cómo? ¿Tendrán tiempo para vender y lo que es más importante, explicar la diferencia de poderíos? De facto, colocan a sus adversarios en el mismo rango que ellos. No se propone de ninguna manera una guerra sucia ni una campaña contestataria, pero sí establecer una diferencia cualitativa entre las propuestas, y por supuesto, entre los candidatos. Se percibe así, una lucha de efectismo, de habilidades mercadológicas, que no propagandísticas, que no advierte las razones y diferencias, entre el candidato del PRD y sus truhanes rivales, que por cierto son muchas. La calidad moral y experiencia de su candidato, principales virtudes, deben ir aunadas a las propuestas y programa. Se desperdicia, insistimos, lo cualitativo. Apenas va empezando, pero hay poco tiempo.
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